¿Alguna vez has escuchado aquellos comentarios diciendo que han tenido días malos y que creen que ya deben hacerse una limpia? O incluso, ¡tú mismo! ¿Has pensado que no puedes tener más mala suerte? Creo que todos, en nuestros años de juventud, hemos sentido que ya no podemos más y que necesitamos simplemente que esos tiempos oscuros desaparezcan por completo. Justamente te contaré la historia que cambió por completo mi vida.
Hace tiempo una de mis mejores amigas subía fotos a sus historias de Instagram sin sentido alguno. Esas fotos tenían un número que incrementaba conforme pasaban los días. A veces tenían ciertas frases o solo era una foto con un número. Al poco tiempo de no verla por varios meses, logramos coincidir con amigos y después de varias horas de ponernos al corriente con nuestras vidas, alguien le preguntó: “Oye, qué onda con las historias que subes, siempre tienen un número ¿acaso las estás contando?” Segundos después de reír, ella mencionó, que era un reto que su primo había creado por juego pero que comenzó a notar que estaba impactando su vida de una forma extraordinaria.
El lo había creado para burlarse de los terribles acontecimientos que le pasaban encontrando el lado chistoso dentro de todo ese túnel negro lleno de desgracias. Al principio todo era un juego, pero se dio cuenta que en realidad, estaba pasando un cambio en él y en su vida, ya que cada día intentaba sacar lo positivo de lo negativo y hacer una mejor versión del día anterior.
Cuando mi amiga comentó que ella comenzó a hacerlo también e igualmente veía cambios en su día a día, todos nos volteamos a ver con complicidad y creamos un reto que llevaríamos por un año entero, el reto de los 365 días positivos.
Hablemos con sinceridad... fue un año duro. Durante todo ese tiempo tuve muchos más retos de los que imaginé, aquellos que me pondrían a prueba y me ayudarían a ser más fuerte de lo que yo misma pensaba que alcanzaría a llegar a ser. Sin pensar que sería una de las mejores experiencias que me han sucedido, la que más enseñanzas me ha dejado y lo que ahora sé... es parte de mi propósito de vida.
Es por eso que aquí te compartiré, las 10 cosas más importantes que aprendí durante “El reto de los 365 días positivos”:
1.- Un año es MUCHO tiempo, TODO puede pasar y TODO puede cambiar. Siempre mantente abierto al cambio, a la transición, modificación e innovación de tu vida.
2.- “Aquel que se dedica a lo que ama está condenado al ÉXITO”. Frase que escuché del gran Carlos Lang (Instagram: care_much). Haz lo que más amas en la vida y el éxito vendrá por sí solo.
3.- Cuando creas algo, tienes que crearlo con pasión y dará grandes frutos. Las grandes cosas se hacen si tú deseas que se lleven a cabo.
4.- Celebra los éxitos de los demás como si fueran los tuyos propios. Compartan esa felicidad infinita e indescriptible.
5.- Todos tenemos la habilidad de impactar de manera positiva, el único paso es hacerlo. Si tienes la oportunidad, no dudes en hacerlo porque recuerda, en algún otro momento de tu vida puedes necesitarla también.
6.- Las personas más cercanas a ti saben el potencial que tienes aunque tu mismo no lo veas. Somos más de lo que pensamos que somos o de lo que podemos llegar a ser.
7.- No todo es positivo y el chiste es aprender de tus días cuando no sucede nada bueno.
8.- Todos tenemos una lucha interna que combatir pero NUNCA estamos solos.
9.- Si no le tienes miedo a tus sueños, no estás soñando en grande.
Y la que más se hizo presente durante todo este tiempo fue…
10.- TODO pasa POR y PARA algo. Así de simple y así de sencillo. Cada una de las cosas que suceden a tu alrededor es porque así debe de ser. No apresures el tiempo y súbete a este tren llamado vida.
Quiero compartirte esta foto ya que comencé este reto con esa sonrisa y terminé los 365 días positivos de la misma forma, sonriendo. Porque después de cada enseñanza, cada tropiezo, lágrima, risa, venía eso, una sonrisa pensando que el día de mañana cuando despertara sería un nuevo reto pero estaba en mi transformarlo para que fuera un increíble día.
Así que te toca a ti…
Te invito a unirte a la gran experiencia que es este reto, un gran viaje de reflexión y aprendizaje que si, no lo he sentido nada fácil pero como alguien me dijo “La vida es fácil, nosotros la complicamos.”
¡A seguir compartiendo positividad y felicidad!
Por: Vivian Abigail De La Cruz García
Guerrera de Marca en Dédalo México, Estudiante de Comercio Internacional de la Universidad TecMilenio Campus Laredo. Interesada en la búsqueda de nuevas estrategias de aprendizaje para las nuevas, actuales y anteriores generaciones.
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